Esta es una de esas ocasiones donde uno está en el lugar correcto, en el momento preciso. Normalmente voy con frecuencia a Córdoba por mi trabajo (recuerden que vivo en Unquillo, unos kilómetros al norte de la capital provincial) y en estos viajes no suelo llevar la cámara, pues cuando uno debe ir de comercio en comercio se transforma más en una molestia que otra cosa. Pero aquél 23 de junio de 2006 fue diferente. Como tenía que ir a Córdoba por una sola cosa, resolví medio de mala gana llevar la filmadora. Efectué la compra en una casa cerca de Alta Córdoba y a sólo una cuadra de las vías, y al salir del local escucho bocina. Miro y veo una G22 llevando un raro vagón y detrás una no menos extraña GT22 con inusual esquema de pintura. Subí al auto presuroso pensando que ese tren se dirigía a los talleres de Alta Córdoba y lo perdería, pero al alcanzarlo éste siguió por la principal sin entrar en el taller. Lo esperé cerca de éstos, donde vi en detalle a este extraño tren, compuesto por la EMD G22CU #7739, seguida de un vagón comodín, y la EMD GT22CU sin identificar y que luego sabría que se trataba de una de las dos locomotoras que irían a Mali. Esta máquina estaba encendida y con personal a bordo pero no traccionaba (lo hacía la G22).
En este video la verán pasar a la cola del tren marchando en dirección a San Francisco.
Como para asegurarme otra toma, seguí al tren unos kilómetros, hasta las inmediaciones de lo que alguna vez fue el desvío Kilómetro 711 (entre Monte Cristo y Alta Córdoba). En un paso a nivel filmé el siguiente video:
Y no hubo tiempo para más. Supongo que ese tren de prueba habrá llegado a Monte Cristo y pegó la vuelta, yo tuve que volver para seguir con mis actividades lamentablemente. Fue el único contacto que tuve con esta misteriosa locomotora, una de las dos que terminaron en el país africano.
Saludos,
Rubén Sagristani
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