.

.

SE SUBIERON AL TREN...

martes, 4 de septiembre de 2012

TRISTEZA INFINITA

 Estación Capilla del Señor
 
De un tiempo a esta parte, las malas noticias ferroviarias están a la orden del día. No hay que sorprenderse mucho; es el desenlace de todo lo que los especialistas vienen diciendo desde hace años. Hubo vaciamiento, hubo desinversión por décadas, esto es una gran verdad, pero lejos de dar respuestas adecuadas, en los últimos tiempos las autoridades se ocuparon de contestar a grito pelado y con mucho enojo a los que trataban de llamar la atención, como si éstos fueran vándalos, enemigos y conspiradores.
Decir que las inversiones estaban mal orientadas, que eran insuficientes, que tales adquisiciones eran inapropiadas, que cual empresa estaba operando con deliberada  negligencia, o que tal funcionario era claramente (y cuanto menos) ineficaz, lo ponía a cualquiera en un lugar de subversión, igualado con represores, esclavistas, desestabilizadores y otras cosas.
No, señores; en los trenes viajan las personas y las riquezas del país, y jamás se los han tomado en serio. Fue más importante estregarle algo en el rostro a los detractores, inaugurando alguna pavada, que prestar un servicio en serio para todos. Y no parece a propósito, sino producto  de la compulsión y el revanchismo; de la soberbia de creer que uno tiene la pelota atada y que la razón divina lo asiste. No señores, a veces hay que consultar con los que saben y podemos sorprendernos con que en vez de equipos sofisticados de apariencia ultramoderna, se necesitan cosas más sencillas (pero se necesitan si o si) como ajustar durmientes. El Sarmiento no necesitaba tanto equipos de aire acondicionado, pantallas de leds, miles de millones de deuda que todavía no se sabe quien la aportará para ponerlo bajo tierra; necesitaba simplemente que se fuera TBAque por su desidia se destruyeron muchos coches, dejando un parque tan reducido que es imposible detenerlos para repararlos como corresponde. El Sarmiento necesitaba trenes que arrancaran y frenaran, cumplir horarios y frecuencias, cruces a desnivel para que no muriera gente, un operador que se preocupara para que todo funcione bien. Tan simple...
Hoy las noticias son que el Sarmiento debe ser reforzado con colectivos (LOCURA!) que los servicios diesel de las lineas Mitre y Sarmiento tienen una recomendación técnica de clausura, que la línea general del Urquiza  está destruida y casi paralizada desde  Rubén Darío a Posadas, que el subte en vez de expandirse es presa, junto con sus trabajadores y pasajeros de una nueva disputa política.


Vía principal de la red troncal del Ferrocarril Urquiza en Hurlingham, Buenos Aires

Y hay proyectos parados, anuncios incumplidos, servicios cancelados, material inservible por toneladas, depredación anónima y de la otra, mas anuncios payasescos ...
Y sí, los trenes descarrilan todos los días. Es lo que pasa cuando no se les presta atención y se los usa hasta que no dan más. No sorprende. Da Tristeza.

3 comentarios:

  1. Y no olvidemos que con el querido Roca pasa lo mismo. En el número 33 destacaban las glorias de la electrificación. Hoy por hoy el servicio eléctrico corta a las 22 por obras de electrificación de la via secundaria que no se ven por ningún lado. Y esto sucede desde 2008/2009! Solamente a comienzos de 2010 hubo una breve restitución del eléctrico en horario full, pero duró hasta el 1/5.
    Muy triste :(

    ResponderEliminar
  2. Creí haber dejado un comentario aquí sobre las obras en el Roca y como cortan el eléctrico a las 22. Fue rechazado?

    ResponderEliminar
  3. A veces el aviso de comentario no nos llega inmediatamente, se toma su tiempo el sistema...

    ResponderEliminar

DISPONIBILIDAD DE NÚMEROS DE TODO TRENES

14 15 22 23 32 33 84 88 89 90 92 93 94 95 96 97 98 99 102 103 104 105 106 107 108 109 110 111 112 113 114 115 114 115 116 117 118 119 120 121 122 123 124 125 126 127 128 129 130 131 132 133 134 135 136 137 138 139 140 141 142 143
EN ROJO: EDICIONES AGOTADAS.
EN NARANJA: SI SE APURA, TAL VEZ.
EN AMARILLO DISPONIBLES.
EN CELESTE, PRÓXIMA APARICIÓN